Nuria tus ojos me muestran la belleza de tu ser, la armonía que me inspiran y que siempre querré ver. Me enseñan que tus sonrisas son los sueños de mi ayer y tus manos en mis manos los caminos del querer. Te estrecho entre mis brazos, siento el roce de tu piel, el brillo de tu mirada me hace otra vez renacer. Sé que la luz del amanecer entre sus brazos te ha de mecer iluminando la vida que has de tener. El sol brillará a tu alrededor entonando con su fulgor la canción que te acunará sin voz y susurrando te hará soñar con cientos de estrellas que danzarán, miles de lunas que enviarán calor, los valles de cuna te servirán, los ríos te arrullarán y el viento hará volar tu ilusión. Ve hacia el mundo ya sin temor porque en tu vida no habrás de hallar nada que te pueda causar dolor.