Bosco acepta, junto a su compañero Max, un último caso antes de casarse: el asesinato de dos adolescentes en el camping de un pequeño pueblo costero llamado Punta Escarlata sucedido ocho años atrás. Por otro lado, Lucía, una joven que acaba de ver morir a su madre, intenta suicidarse con una sobredosis de pastillas, pero mientras la están reanimando le vienen a la mente escenas de una playa en la que aparece, por un impulso incontrolable, después de huir del hospital. Una vez en Punta Escarlata, comienza a tener visiones de los asesinatos de dos jóvenes y reconoce el lugar donde las chicas asesinadas fueron enterradas. Bosco y Max comienzan una investigación en colaboración con la Guardia Civil del pueblo, que lleva ocho años sin obtener ninguna pista. Los recién llegados irán interrogando a los sospechosos mientras siguen ocurriendo extraños sucesos.