Pollálope y su padre creen haber hallado una solución para que Raposa escape de la torre, mientras en el castillo Eusebia ataca al príncipe y a sus hermanos y el rey Torcuato se aproxima.
Eusebia ha descubierto a Raposa, se lo ha fastidiado todo y la ha encerrado de por vida, y por si fuera poco, tanto ella como el rey Torcuato se dirigen ahora a provocar el caos en el castillo.
Mientras Pollálope convence a Raposa de que vuelva para que Eusebia no se cargue a su padre, ella decide huir esa noche, no sin antes asistir a la fiestaca de Cabrales.
Raposa descubre un misterioso pincel mediante el cual logra salir de su prisión; allí se reencuentra con Cabrales y junto a él investiga sobre el pincel y sobre sus padres.
Mientras Raposa se desespera por salir a reunirse con su amante, éste monta una fiesta para atraerla y ordena a sus hombres buscarla, justo cuando los soldados del rey enemigo atacan la aldea.
Por culpa de su hurón chivato, la vieja Eusebia descubre que Raposa estuvo fuera y toma medidas. Por otra parte, el príncipe Cabrales sigue sin encontrarla.